Luchamos contra los problemas de vivienda en Nou Barris

Por el derecho a un a vivienda digna

¿Quiénes Somos?

Somos vecinas y vecinos que nos organizamos para defender el derecho a una vivienda digna. Somos personas que no podemos pagar el alquiler, acceder a una vivienda o que tenemos la necesidad de ocupar.

Un espacio de apoyo mutuo para construir alternativas y actuar gracias a la fuerza colectiva: compromiso, lazos de solidaridad y compañerismo. Un espacio donde todo el vecindario, más allá de la edad, el género o el origen, nos unimos para luchar y hacer frente a la misma problemática: la vivienda. Individualmente, no tenemos todas las herramientas, pero si compartimos nuestras experiencias, conocimientos y voluntad de ayudar, lo podemos todo.

¿Tienes problemas con la vivienda?

¿Te quieren subir el alquiler? ¿Has recibido una orden de desahucio? ¿Vives en un piso ocupado? ¿Tienes dificultades para pagar la hipoteca?

Si tienes problemas con la vivienda, ¡no estás sola! En el Sindicato de Vivienda de Nou Barris nos organizamos para hacer frente a los rentistas, bancos y fondos buitre. ¡Juntas podemos defender nuestros hogares!

Si necesitas ayuda, escríbenos a través del siguiente formulario, o puedes llamarnos o enviarnos un WhatsApp al teléfono [FALTA TELÉFONO], y nos pondremos en contacto.

¡Defendamos colectivamente una vivienda digna!

Preguntas Frecuentes

Sabemos que los problemas de vivienda pueden generar muchas dudas. Aquí encontrarás respuestas claras sobre desalojos, contratos de alquiler, ayudas disponibles y más . Infórmate y toma decisiones con seguridad

¿Pueden obligarme a abandonar la vivienda antes de que termine el contrato?

No, nadie puede obligarte a irte antes de que termine el contrato, a menos que haya una orden judicial. Si tienes un contrato en vigor y pagas el alquiler, el casero no puede echarte porque sí.

Las únicas razones legales para que el propietario recupere la vivienda antes del fin del contrato son:

Necesidad del propietario o un familiar en primer grado (padres, hijos). Pero solo si estaba especificado en el contrato y lo notifica con 4 meses de antelación. Además, debe demostrarlo y si no la usa en 3 meses, puedes reclamar volver.
Incumplimiento del contrato: Si no pagas el alquiler, haces obras sin permiso, subarriendas sin autorización o causas daños graves en la vivienda, el casero puede iniciar un proceso de desahucio.

Si el casero te presiona, amenaza o intenta echarte sin seguir el proceso legal, NO te vayas sin más. Guarda pruebas y busca asesoramiento legal. Solo un juez puede ordenar un desahucio.

¿Existen alternativas para renegociar mi deuda hipotecaria?

Sí, existen varias alternativas para renegociar tu deuda hipotecaria si tienes dificultades para pagarla. Lo mejor es actuar rápido y hablar con el banco para buscar una solución. Aquí tienes algunas opciones:

Carencia de capital: Puedes negociar con el banco pagar solo los intereses durante un tiempo, lo que reduce la cuota mensual temporalmente.
Ampliación del plazo de la hipoteca: Al alargar los años de pago, la cuota mensual se reduce, aunque a largo plazo pagarás más intereses.
Revisión del tipo de interés: Si tienes una hipoteca con intereses altos, puedes negociar con el banco para que los bajen o cambiar de tipo variable a fijo o viceversa.
Reunificación de deudas: Si tienes otras deudas (préstamos personales, tarjetas de crédito), puedes pedir al banco que las unifique en la hipoteca para pagar una sola cuota más baja.
Dación en pago: Si no puedes pagar y el banco lo acepta, puedes entregar la vivienda y cancelar la deuda. Esta opción está contemplada en el Código de Buenas Prácticas Bancarias para personas en situación vulnerable (Real Decreto-Ley 6/2012).
Subrogación o novación de la hipoteca: La subrogación te permite cambiar tu hipoteca a otro banco con mejores condiciones, mientras que la novación es una renegociación con el mismo banco.
Acogerse a medidas de protección para deudores vulnerables: Si cumples ciertos requisitos de ingresos y cargas familiares, puedes beneficiarte de medidas como la moratoria en desahucios o la reestructuración de la deuda (Real Decreto-Ley 1/2015 y Real Decreto-Ley 6/2012).

Base jurídica:

Real Decreto-Ley 6/2012: Código de Buenas Prácticas para la reestructuración de deudas hipotecarias.
Real Decreto-Ley 1/2015: Segunda oportunidad y reestructuración de deuda para deudores en insolvencia.

¿Cómo empadronarme en una vivienda?

Empadronarse en una vivienda es un trámite sencillo y necesario para poder acceder a servicios públicos, ayudas, y derechos ciudadanos en España. Aquí te explicamos cómo hacerlo:

1. Requisitos para empadronarse

Generalmente, puedes empadronarte si vives en la vivienda de manera habitual y no estás empadronado en otro lugar. Si el propietario de la vivienda está de acuerdo y vives allí de forma permanente, puedes hacerlo.

2. Documentación necesaria

Para empadronarte, necesitarás presentar algunos documentos. Estos pueden variar dependiendo del municipio, pero en general son:

Documento de identidad: DNI, NIE o pasaporte (dependiendo de tu nacionalidad).
Justificante de domicilio: Puede ser un contrato de alquiler, una escritura de propiedad de la vivienda o, si vives en una vivienda familiar, un documento que lo acredite (como una factura de suministros a tu nombre o el del titular del contrato de alquiler).
Formulario de empadronamiento: La mayoría de los ayuntamientos tienen un formulario que debes rellenar con tus datos personales. Puedes encontrarlo en la web del municipio o pedirlo directamente en la oficina de empadronamiento.
En algunos casos, si es necesario, una copia del libro de familia (si te empadronas con hijos o familiares).

3. ¿Dónde hacerlo?

El trámite de empadronamiento se realiza en el Ayuntamiento del municipio en el que resides. Algunas ciudades permiten hacerlo online, pero en muchos casos, es necesario acudir en persona.

Procedimiento:

Presencialmente: Dirígete a la Oficina de Atención al Ciudadano o el Registro Civil del Ayuntamiento correspondiente. Allí, entregarás la documentación necesaria y, en algunos casos, firmarás un formulario de empadronamiento.
Online: Si el municipio lo permite, puedes hacer todo el trámite a través de la página web del Ayuntamiento. Normalmente, necesitarás escanear los documentos y adjuntarlos al formulario online.

4. Proceso y plazos

Una vez que entregues la documentación, el proceso de empadronamiento suele ser bastante rápido. En algunos municipios, te entregarán un certificado de empadronamiento el mismo día o en pocos días. Este certificado es necesario para ciertos trámites, como obtener ayudas, acceder a servicios de salud, o inscribir a tus hijos en el colegio.

5. ¿Qué hacer si no puedes empadronarte en esa vivienda?

Si el propietario no está de acuerdo o no te proporciona los documentos necesarios para empadronarte, podría ser más complicado. En esos casos, puedes hablar con el Ayuntamiento para buscar alternativas. Algunos municipios permiten empadronarse en situaciones excepcionales, por ejemplo, en el caso de personas sin hogar o en viviendas de familiares.

6. Cambios o modificaciones

Si te mudas o cambias de vivienda, también deberás actualizar tu empadronamiento. Este cambio es importante para que la administración tenga tus datos actualizados y puedas acceder a servicios y ayudas correspondientes.

El empadronamiento es un derecho de todos los residentes y un requisito indispensable para poder disfrutar de muchos servicios públicos.

¿Cómo proceder ante una orden de deshaucio?

lo primero es no entrar en pánico. Un desahucio no es inmediato, y hay cosas que puedes hacer.

Lee bien la notificación: Si te ha llegado una orden de desahucio, revisa la fecha y el motivo. Puede ser por impago de alquiler, vencimiento del contrato o por otras razones.
Busca ayuda lo antes posible: Acude a una oficina de vivienda de tu comunidad autónoma, a los servicios sociales o a una plataforma antidesahucios. Hay abogados gratuitos que pueden asesorarte.
Si es por impago, revisa si puedes acogerte a una moratoria o si puedes negociar con el casero para pagar la deuda poco a poco. A veces aceptan un plan de pagos.
Solicita un abogado de oficio: Si no tienes dinero para uno, pide asistencia jurídica gratuita en el juzgado o en el colegio de abogados de tu ciudad.
Si tienes hijos, personas mayores o en situación de vulnerabilidad en casa, avisa a servicios sociales cuanto antes. En algunos casos, pueden retrasar o incluso paralizar el desahucio.
El día del desahucio: Si llega el momento y no has encontrado solución, intenta negociar con el juzgado o la policía para ganar algo de tiempo. No te enfrentes a ellos, pero exige que respeten tus derechos.

Cada caso es distinto, pero lo importante es moverse rápido y pedir ayuda. No estás solo, hay colectivos que pueden apoyarte.

¿Qué es y cómo pedir una moratoria hipotecaria?

Una moratoria hipotecaria es como una pausa en el pago de tu hipoteca. No significa que te perdonan la deuda, pero sí que puedes dejar de pagar durante un tiempo (normalmente varios meses) si estás pasando por una mala situación económica.

Durante ese tiempo no te exigirán pagar las cuotas (o una parte de ellas), y luego ese dinero lo pagarás más adelante, alargando el préstamo o repartiendo esas cuotas entre los meses futuros.

¿Cómo pedirla?

Habla con tu banco lo antes posible. Diles que no puedes pagar y que quieres solicitar una moratoria.
Explica tu situación económica. Tendrás que demostrar que has perdido ingresos, estás en paro, eres autónomo con caída de ingresos, etc.
Presenta documentos. Normalmente te pedirán:
- Libro de familia o certificado de pareja de hecho.
- Declaración de ingresos o paro.
- Certificado de empadronamiento.
- Escritura del préstamo hipotecario.
Firma el acuerdo. Si el banco acepta, te harán firmar un documento con las nuevas condiciones.

Importante: La moratoria no genera intereses extra durante ese periodo si está regulada por el Gobierno (como pasó durante el COVID), pero si es un acuerdo privado con el banco, puede que sí. Pregunta antes de firmar.

Base jurídica:

Real Decreto-ley 11/2020, de medidas urgentes para hacer frente al impacto del COVID-19 (artículos 16 a 28).
Ley 5/2019, reguladora de los contratos de crédito inmobiliario: establece las normas para la modificación de préstamos hipotecarios y protege al consumidor.

¿Qué hacer si el casero me corta la luz, el agua o el gas para que me vaya?

Eso que está haciendo tu casero es completamente ilegal. Cortar suministros para echar a un inquilino se considera coacción y puede denunciarse. Aquí tienes lo que puedes hacer:

Guarda pruebas: Toma fotos del contador, graba vídeos de los grifos sin agua o los interruptores sin luz, y guarda cualquier mensaje o aviso del casero.
Llama a la compañía de suministros: Pregunta si ha sido un corte administrativo o si el propietario ha pedido la baja. Si el casero lo ha hecho sin tu consentimiento, díselo a la compañía.
Denuncia en la policía: Ve a la comisaría y pon una denuncia por coacciones. El casero podría enfrentarse a una multa o incluso a penas de cárcel si se demuestra que lo hizo para echarte.
Pide ayuda legal: Puedes acudir a un abogado de oficio, a asociaciones de inquilinos o a los servicios sociales de tu ayuntamiento. Si tienes contrato en vigor, nadie puede echarte sin una orden judicial.
Si tienes urgencia, llama al 112 o a los servicios sociales. En algunos casos, pueden obligar al casero a restablecer los suministros de inmediato.